Solamente aquel que ha vivido el
verdadero amor del alma, la fuente de bienestar, luz y expansión que llega
desde la divinidad, desde la conexión con la fuente, puede dejar de tener miedo
del amor humano.
Ya que si lo que llamamos amor en el
plano humano no esta motivado y abierto a esta gran bendita energía que viene
desde planos superiores, no es otra cosa mas que dependencia, amor
condicionado, lleno de dudas, lleno de celos y muchas ganas de controlar.
Buscamos el “amor” en una relación
dependiente porque no sabemos accesar al gran estado de amor universal, porque
aún no confiamos del todo que “La Fuente” nos proveerá de lo que sea que
necesitemos: amor, bienes materiales, amistades, maestros, lecciones,
aprendizaje, gracia, feminidad, dulzura, placer y expansión.
El día que desde nuestra limitación
humana podamos dejarnos completamente en manos de esta Fuente, será el día en
que podamos encontrar relaciones realmente basadas en el amor y no en la
dependencia.
Nuestras “relaciones”, o, como dice Osho,
un eterno relacionarnos, sin posesividad, sin miedo y sin querer controlar,
aprendiendo a amar a todos; cultivarán el Amor Universal, en el cual se
manifiesta la compasión y el profundo deseo que todos los seres humanos sean
verdaderamente felices.
Y así, cuando amemos porque podemos, y no
porque lo necesitamos, las cosas cambiarán por completo. Ya no existirá el
miedo de que la persona “amada” se vaya o no haga lo que nosotros queremos,
porque ahora podremos amar mas allá e las formas y nuestro amor jamás podrá
limitase a una persona.
Desde ahí podemos amar a todos, y por ley
de causa y efecto, amor es lo que recibiremos. Desde ese amor que no surge de
la necesidad, siempre estarás rodeado de amor, el amor te llegará a través de
todo tipo de circunstancias, a través de todo tipo de personas.
Aquel que sabe amar, será amado. Aquel
que busca meramente controlar, depender y entregar la responsabilidad de su
vida a alguien mas, siempre será decepcionado. El que ama desde el alma será multiplicado.
Aquel que esté tan lleno de si mismo;
aquel que haya encontrado la Fuente de toda la vida, será abastecido de
abundantes regalos, tendrá acceso a la sabiduría universal, recuperará el poder
que le fue otorgado. La magia es posible para aquel que cree en ella,
permitiendo que las grandes verdades se nos revelen poco a poco, aprendiendo a
amar y a vivir desde una nueva dimensión. Confiando, sonriendo…
Que así sea y así es.